Los días se volvieron eternos...
y las noches se hicieron cada vez más frías...
Y mis esperanzas por conseguirte...
Se esfumaron una a una....
Ahora solo me queda...
¿ Qué me queda?
Mi motivo de existencia...
Tú .
El mismo que me da la vida...y me la quita al instante...
Siempre eres tú....
El destino quiso que me enamorara de esta manera de ti...
Pero aún no entiendo por qué....
Estás demasiado lejos...y encima, ni siquiera me conoces...
Por qué?
Lo único que es que..
Desde que Cupido...me clavó ésa flecha en este corazón....
No he dejado de pensarte...
Y mucho menos...de llorarte.
Y ya son muchas las veces en las que quiero tirar la toalla....
Porque me rindo....
Porque el dolor es tan grande que no puedo soportarlo...
Pero es que te quiero....
Y aunque me haga daño la distancia...
Sigo aquí suspirando por ti.
Ya sé que mis lágrimas no te traeran hacia a mí...
Ya sé...
que por mucho que grite tu nombre.. hasta quedarme sin voz..
Tú no lo oirás.
Todos mis intentos...los realizo en vano.
No hay nada que se pueda hacer...
Salvo....
una cosa.
Seguir esperando, y seguir creyendo en ilusiones falsas que nunca se cumplirán...en sueños en los que sales tú que jamás se realizarán...