He aquí una de las personas más importantes de mi vida. Hemos visto la luz del dia juntas (yo primera pero da igual, por cuatro horas de nada)
o mejor dicho, la luz de la luna juntas. Desde pequeñas lo compartíamos casi todo. Y aunque siempre que nos veíamos acababamos dándonos de leches, éramos y seguimos siendo las mejores amigas. Creo que nos necesitamos la una a la otra, o por lo menos yo la necesito a ella.
Somos como dos hermanas, ella es la guapa y la lista y yo soy la fea y tonta. Y del físico ya ni hablemos como nos diferenciamos. Pero a pesar de las diferencias que tenemos, nos complentamos como dos gotas de agua (o casi;))
Nos separan físicamente cuatro mil kilómetros, es cierto, pero desde luego no creo que nos puedan arrancar del corazón de la otra fácilmente. No puedo describir nuestra relación porque no existen palabras para hacerlo. Desde luego sé, que ella, siempre ha estado ahí. En las buenas y en las no tan buenas.
Y eso no se puede borrar.
Nunca.